Para explicarte cómo se organiza internamente el cuerpo, quiero aunar principalmente 2 ideas en esta entrada del blog. La primera, la idea de la “teoría del triaje”, producida con genialidad por el doctor Bruce Ames. Y la segunda, es tratarte de explicar de manera sencilla como el cuerpo se adapta a “todo”; sea bueno o sea malo.
Para que entiendas la teoría del triaje quiero enviarte a una lectura corta en el blog de mi compañero Bernat. De paso espero que le conozcas, te guste lo que comparte y te beneficies de todo lo que puede aportarte.
Partiendo de la teoría del triaje, podemos ver cómo el organismo organiza sus recursos en función de las prioridades relacionadas con la supervivencia. Ahora quiero que te pongas en la situación de la persona que se empieza a alimentar todos los días de productos ultraprocesados. Tras un tiempo, el cuerpo será capaz de adaptarse a esta nueva situación (por supuesto, muy alejada de lo óptimo) de manera que la persona “no sufra” a corto plazo. Es decir, el cuerpo no entiende que tiene opciones mejores. Lo que el cuerpo entiende es lo que recibe normalmente; es que este tipo de alimentos es “la normalidad”, y para ello se reorganiza internamente de manera que puedas funcionar de la mejor forma posible con esta normalidad.
¿Qué sentido tendría hacerte sentir un dolor desmesurado de tripa y de cabeza todos los días que comes ese alimento si es lo único que tienes? Es lo mismo que ocurre cuando hay épocas de hambruna. A partir de cierto día comiendo una miseria el cuerpo se adapta y no te hace sentir un hambre voraz constantemente. Entiende, que esta es la normalidad y se adapta a ello. Por supuesto, a un precio. En este caso, reducir enormemente tu metabolismo y “capando” tus funciones reproductivas entre otras cosas.
Y lo mismo, para que tu puedas pasar 5 años comiendo alimentos insalubres cada día sin pagar el precio (a corto plazo), el cuerpo reorganiza sus recursos internos, de manera que puedas funcionar de la mejor manera posible y sin hacerte la vida imposible. El precio a pagar es el “despilfarro” y el agotamiento de enzimas, cofactores, aminoácidos esenciales y en general, todas tus reservas de los materiales más preciados para tu supervivencia a largo plazo y longevidad.
Por ejemplo, tus reservas de enzimas antioxidantes se destinarán a reducir todo el estrés oxidativo y consecuente inflamación causados por estos alimentos en el intestino. Se reducirá entre otras muchas cosas, la eficacia de tu sistema inmune ante diferentes agresiones y la reparación de tu endotelio vascular, vital para poder evitar la aterosclerosis, pero que a corto plazo no es tan importante.

No estar enfermo no es sinónimo de estar sano
Te pasarás 5 años comiendo basura sin sentirte enfermo o sin caer enfermo (y no me refiero a resfriados, que serán la norma. Eso no es una enfermedad), pero muy alejado de lo que es una salud óptima que te permita realizarte como persona. Irás “sobreviviendo”, como muchas personas pasan sus días; uno tras otro. Sin energía, sin capacidad para concentrarse y muertos de sueño al acabar su jornada de trabajo. Y para poder resistir estos 5 años (o más si tienes suerte, dependiendo de tu predisposición genética) irás acumulando grasa para protegerte de todas las toxinas de estos alimentos, e iras agotando como hemos hablado, tus reservas de micronutrientes.
Todas las agresiones sobre el organismo tienen un precio. El problema es muchas veces, que no las pagamos a corto plazo, sino 20 años después. Estas deficiencias micronutricionales son “el principio del fin”, pues a partir de los 40 o 50 años (todo depende de cómo hayas castigado a tu cuerpo) empezarás a sufrir todos los daños causados de golpe. Sí había un precio a pagar por cada bolsa de Doritos, solo que se iba a cobrar con intereses.
La nueva “normalidad”
Tras 5 años comiendo de esta manera tu cuerpo se ha reorganizado internamente para dar lo mejor de sí en estas circunstancias (infames). Por eso, no sientes indigestión cuando comes estos alimentos, ya que vives sumergido en ese estado. Por eso no te sientes cansado, porque vivir cansado es tu normalidad. Es como esa música insidiosa de las tiendas de ropa. A los 5 minutos ya no la percibes porque de lo contrario, te tirarías de los pelos.
Te has acostumbrado a no percibir todo lo que está mal en tu cuerpo y en su funcionamiento porque de lo contrario, no podrías seguir viviendo. Te has desconectado de tu cuerpo. Y por eso hablo de alimentación consciente, pues recuperar esa consciencia es vital para poder recuperar tu salud.
¿Qué es lo que ocurre en esta nueva situación? Que los cambios que hagas a mejor, no van a tener el efecto a corto plazo que deseas. Tu cuerpo se ha reorganizado internamente para funcionar con Doritos y Donuts. Cuando le des brócoli o un aguacate, al principio no sabrá que hacer con ello por muy buenos que sean. Tu cuerpo se ha reorganizado para funcionar siempre con glucosa y para comer cada 2-3 horas. Cuando le empiezas a dar grasas saludables y a tratar de espaciar las comidas, te vas a sentir horrible; poco menos que te vas a desmayar y tu cerebro va a implorarte para que le metas un Donut, que es lo que tu cuerpo sabe utilizar y se ha hecho un maestro en ello.
Hay esperanza
Sí, hay buenas noticias; motivos para tener esperanza, ya que tu cuerpo ciertamente funciona mejor con brócoli y con aguacate, que con Doritos y Donuts. Por lo tanto, si se lo empiezas a dar de nuevo con regularidad, haciendo que esta sea tu “nueva normalidad”, se va a producir ese proceso de reorganización, incluso más rápido, pues es lo que el cuerpo realmente quiere y necesita para funcionar bien. Solo, que se ha olvidado de cómo funcionar al máximo con estos otros alimentos. Así que, debes tener paciencia y confiar en el proceso. Debes entender que los daños que has causado durante 10 años no se van a resolver en 2 o 3 meses, pero igual sí en 2 o 3 años, que si lo piensas es una fantástica noticia, ya que, igual lo justo sería que tuvieses que hacer las cosas bien durante 10 años para pagar la deuda acumulada.
Por eso la mayor parte de las personas fracasan con los buenos hábitos. Lo primero, porque creen que lo que hay que hacer ahora es “comer menos y hacer más ejercicio” (lee el artículo), y lo segundo, porque no tienen paciencia. Vivimos en la sociedad de la inmediatez. ¿Qué podemos esperar de nosotros si ya no somos capaces ni de aguantar un vídeo de 10 minutos, y tenemos la necesidad de recibir un estímulo nuevo cada 30 segundos (TikTok)?
Si estar sano fuese fácil, la mayor parte de nosotros lo estaríamos. La realidad es que más del 60% de la población está enferma, otro 30% está en este periodo de transición hacia la enfermedad y solo un 10% de personas están realmente sanas.

Grábate esto a fuego. Debes (Y QUIERES) tener paciencia. Olvídate de llegar con tu cuerpo deseado a esa boda dentro de 2 meses. No vas a conseguir más que frustrarte, volver a los malos hábitos y vas a haber hecho de tu vida una pesadilla, tras estar 2 meses comiendo ensalada y merluza al vapor. Deja de valorarte en relación a tu físico actual, y empieza a valorarte en relación a las acciones cotidianas que vas a emprender cada día para cuidar tu salud. Ahí residirá tu éxito.
Espero que te haya gustado. A mi personalmente me encanta escribir. Disfruto muchísimo. Creo que tengo mucho que aportar de esta manera. Creo que mi manera de ver las cosas, puede ayudarte y mucho. Escríbeme que te ha parecido en los comentarios. Me encantará leerte.
Gracias por tan excelente articulo, me anima a seguir haciendo los cambios correctos y también poder ayudar a otros 😉
Me alegra mucho poder ayudarte Mónica. Gracias a ti por tu comentario. A seguir!
Totalmente de acuerdo. aunque yo diría que no es que no tengamos paciencia es que el desconocimiento te hace ser borrego ,uno más del rebaño y por nuestra parte vivir en modo robot nos hace entregar a otro la responsabilidad de aprender a cuidarte y curarte así que es responsabilidad de cada uno abrir la mente y ver más allá de lo que te puede contar nadie ,experimentar con uno mismo que hay de verdad o no en los distintos procesos de cambio
Mil gracias por toda la info 😃
Gracias a ti María por un comentario tan enriquecedor 🙂
Un distinto 🔥Me encantó el post!
Me alegra mucho que te haya gustado. Gracias por tu comentario.
gracias por poner las cosas tan claras aunque crudas. Necesitamos la verdad y desmitificar lo inmediato, las recetas mágicas y la lisonja publicitaria.
Gracias a ti Elisa por tu comentario. De eso se trata 🙂
Claro que aportas, y mucho. Sigue escribiendo porque estoy cambiando el chip con respecto a las grasas saludables, el tiempo de descanso y la forma de comer; hábitos implantados y hechos ley por costumbre. Mas todo castillo puede derribarse. Gracias.
Muchas gracias Virginia por un comentario tan positivo. Lo agradezco de verdad. Me alegro que todo lo que aporto te esté ayudando 🙂
Hola, Marcos, hace 2 años i medio empecé a hacer dieta, después de 40 años de muy mala alimentación y mucho azucar, para perder 12 kg y mejorar mi SII, lo que hice mas que nada fué quitarme el azúcar y las harinas refinadas, y lo que conseguí es además dejar los ansiolíticos i las pastillas para dormir. Ahora hace 2 meses que te sigo, he empezado ayuno 16/8 +-, he restringido más aún las harinas integrales que tomaba, y mi cuerpo ya no me pide azucar, no tengo ansia de comer, es fantástico lo que trasmites y como lo trasmites, todos los dias entro a las redes o youtube para ver si has subido algun video o tema más….muchas gracias por tus aportes, ahhh, mañana empiezo el reto alimentación consciente.
Luisa de verdad, no sabes la alegría que me hace recibir tu comentario.
Gracias por las palabras positivas hacia mi persona y mi trabajo. Me hacen muy feliz. Me alegra mucho tu progreso.
Un fuerte abrazo.
Ansiedad, que palabra corta para una realidad tan larga. Soy ansioso por naturaleza, estoy resolviendo un problema y ya me estoy organizando para el que viene, no me puedo detener, tomo ansiolíticos para poder bajar la carga y poder dormir. Termino de cenar, y a la hora ya estoy parado mirando dentro de la heladera, buscando lo que sé que no voy a encontrar. Por supuesto estoy excedido de peso, debería pesar 75 Kg y peso 88 Kg. Salgo a pedalear casi todas las mañanas, no menos de 2 hs y a buen ritmo, pero ni eso logra sacarme la ansiedad. Qué sugerencias tienes para mí? ( Más allá de que me mate jajaja jajaja). Te mando un abrazo Marcos.
Hola Luis Javier.
Gracias por leerme. Espero poder ayudarte con todo lo que comparto.
Decirte, que muchas veces la ansiedad es fruto de una mala alimentación y de deficiencias tanto en energía como en nutrientes.
Si quieres podemos tratar tu caso en consulta y ver qué podemos hacer.
Un saludo.
Yo estoy pasando por ese proceso de mantenerme en los buenos hábitos, tenía qe llegar una enfermedad para darme cuenta del daño que le estaba haciendo a mi cuerpo y claro no ha Sido facil todo este proceso he aprendido muchas cosas, y sobretodo aprendí qe las cosas no se solucionaran para ayer, todo tendrá su tiempo para sanar, para cambiar, y aunqe he tenido buenos resultados me sigue costando mucho todo eso, incluso es importante tambn educar nuestra mente para qe nos ayude más en todo esto…
Hola Getzel.
Gracias por tu tiempo en leerme y en contarnos tu testimonio. Espero que todo el contenido que comparto te sea de mucha ayuda.
Un fuerte abrazo y ánimo en tu proceso de cambio y mejora.